Cuando hablamos de la diferencia entre alta tensión, media tensión y baja tensión, nos referimos al potencial de electricidad que puede transportar una instalación eléctrica, es decir, el voltaje.
Estas tres tipologías de tensión eléctrica se utilizan para diferentes fines:
- Los voltajes de 69 kV-230 kV se conocen como «Alto voltaje»: para transportar electricidad. Los voltajes 230 kV-1,100 kV se conocen como «voltaje extra alto», y con 1.100 kV se denominan como «voltaje ultra alto». Se utilizan para transportar energía eléctrica a grandes distancias, desde los centros de generación (eólicos, hidroeléctricos, solares o térmicos) hasta las subestaciones de transformación.
- Los voltajes de 600 V-69 kV se conocen como «voltaje medio»: para distribuir la electricidad. Las instalaciones en media tensión se generan en las subestaciones de transformación, pasando a niveles de tensión comprendidos entre 34.5kV a 10kV y mediante redes eléctricas logra transportar la electricidad hasta las subestaciones de distribución, barrios, centros urbanos, semiurbanos y zonas rurales a nivel nacional.
- Voltajes de 600 V e inferiores se conocen como «baja tensión»: para consumir la electricidad. Se utiliza en la mayoría de las aplicaciones domésticas, comerciales e industriales. Los enchufes, tomas de corriente, iluminación, calefacción, electrodomésticos pueden alimentarse con baja tensión.
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